Rodrigo De Paul está viviendo uno de los mejores momentos de su carrera en el Atlético de Madrid. Su rendimiento en este inicio de 2025 ha sido clave para el equipo, destacándose como un jugador insustituible en el esquema de Diego Simeone. Su capacidad para detectar espacios donde otros solo ven obstáculos y su visión privilegiada para filtrar pases decisivos lo han elevado a un nivel que no se veía desde su llegada a la entidad rojiblanca.
El cambio en su desempeño ha sido tan notable que ha llevado al Atlético a replantearse su postura con respecto al mediocampista argentino. Si bien el verano pasado se contemplaba su salida como una opción viable, ahora se baraja seriamente la posibilidad de renovar su contrato, que expira en 2026, tal y como se cuenta desde el diario Marca. El club sabe que la próxima ventana estival sería la última oportunidad para recuperar la inversión de 36 millones de euros que se realizó al ficharlo desde el Udinese, pero también es consciente de que pocos jugadores en el mercado pueden ofrecer lo que De Paul aporta al equipo.
Tenía un pie fuera y ahora De Paul es intocable para Simeone
En este contexto, durante el mercado invernal llegó una oferta formal del West Ham por 25 millones de euros, la cual fue rechazada sin titubeos. El Atlético tiene claro que no quiere debilitar su plantilla en este tramo crucial de la temporada. De Paul, junto a Pablo Barrios, se ha consolidado en el centro del campo, mostrando liderazgo, carácter y determinación, virtudes que lo convierten en un pilar fundamental.
Aunque el argentino ya supera la treintena, su nivel actual lo pone en el radar de grandes clubes europeos y mercados emergentes como el de Arabia Saudita. Sin embargo, la decisión final aún está por tomarse, ya que tanto el jugador como el club están valorando los próximos pasos con cautela.