El fichaje de Ousmane Dembélé por el Paris Saint-Germain, tras una inversión de 50 millones de euros, está generando crecientes dudas en el club parisino. Aunque se esperaba que el exjugador del Barcelona asumiera un papel clave tras la salida de Kylian Mbappé, su rendimiento ha estado lejos de lo prometido, tanto en la liga francesa como en la Champions League.
Luis Enrique, quien no escatimó en elogios hacia Dembélé al inicio de la temporada, confiaba en que el extremo francés compensara la ausencia de los 44 goles que dejó a Mbappé el curso pasado. Sin embargo, los resultados no respaldan esa confianza. Con solo 5 goles y 7 asistencias en todas las competiciones, sus estadísticas no son terribles, pero resultan insuficientes considerando las expectativas y, especialmente, su bajo impacto en Europa. En la Champions, Dembélé apenas ha aportado una asistencia, lo que contrasta con el nivel exigido en una competición donde el PSG lucha por sobrevivir.
Dembélé sólo arroja dudas en el PSG
El reciente partido contra el Bayern de Múnich fue un reflejo de su inconsistencia. Aunque mostraron algunos destellos en el primer tiempo, su actuación global fue calificada como decepcionante por la prensa francesa. La expulsión por doble amarilla no solo dejó al equipo en una situación delicada, sino que también evidenció su falta de madurez en momentos clave, señalándolo como uno de los principales desastres del PSG, al y como cuentan en AS.
En París, la paciencia parece estar llegando a su límite. Dembélé, llamado a ser un líder en el ataque parisino, no ha logrado dar ese esperado salto de calidad, lo que empieza a alimentar el arrepentimiento por su fichaje.